Crítica: El diablo a todas horas

Película basada en un aclamado libro del escritor Donald Roy Pollock, “El diablo a todas horas” cuenta con guion coescrito por el americano director, guionista y productor cinematográfico Antonio Campos, acompañado por Paulo Campos.


Comienza la película y una voz en off que es del escritor Donald Ray Pollock nos explica la historia de una familia y de un lugar durante unos segundos; a continuación vemos a Willard Russel (Bill Skarsgard) en el pasado, bajo la amenaza del peligro de la Segunda Guerra Mundial, vemos la crudeza de la guerra y cómo un día Willard, en un restaurante, conoce a su chica, Charlotte (Haley Bennett), que trabaja allí de camarera. Se enamoran y tienen un hijo: Arvin (Tom Holland), de chiquitín interpretado por Michael Banks Repeta. Se van a vivir a Knockemstiff ,Ohio, a una casa del campo. Ellos son extraños para los habitantes y debido a eso tendrán algún problema que otro, pero saldrán muchos problemas añadidos: Una cruz en el jardín. Una mala enfermedad. Unos abuelos. Una niña. Un cura. Un policía. Una pareja de desquiciados y el fanatismo religioso como tema central… En fin… la voz en off del escritor Donald Ray Pollock sigue durante todo el metraje y esto le confiere a la película unos términos absolutamente literarios.

“El diablo a todas horas” es una película que con su título advierte del contenido. Cualquiera que la vea tendrá la certeza de estar paseando por el infierno, cada personaje tiene un futuro incierto o de intenciones nefastas. El comienzo áspero y sombrío de esta descerrajada e inquietante película ya nos sitúa bajo el ojo maléfico de lo que va ocurriendo. Su arrojo narrativo y su sequedad dramática hacen de este deambular por la intriga psicológica, una obra violenta de lo cotidiano.

Antonio Campos se sube al fino alambre de este enrevesado género, consciente de los riesgos que corre, estirando los límites de la realidad y especulando con escenas absurdas que por suerte no nos llegan como habituales. En este sentido, la puesta en escena que se apoya en el sólido trabajo de los actores, es ejemplar. Campos conjuga personajes y situaciones en un retrato social incisivo. El fanatismo religioso, la intolerancia, la soledad, son algunas de las pinceladas más obvias. Pero no duda en introducir, con dolorosa valentía, la influencia que la guerra tiene entre los soldados, sus familias y, en resumen, en toda la sociedad, lejos de cualquier maniqueísmo subraya las contradicciones de personajes que emprenden opciones equivocadas no solo por motivos personales, sino como el resultado de un contexto social que le impulsa a ello. Sin embargo, a medida que avanza el metraje y coincidiendo con la aparición de elementos que podrían ser interpretados como subtramas inconexas, la consistencia de la historia se resiente y la película parece perder contundencia.

A pesar de contar con la buena actuación del pequeño Michael Banks Repeta, “El diablo a todas horas” no cae en el error de convertirse en una película con niño, la candidez de su mirada es decisiva para poner de manifiesto las contradicciones de los adultos; estas se manifiestan indudablemente en cada uno de los restantes personajes. No hay respuesta más palpable que las lágrimas de un niño protestando ante los hechos de un mayor.

Antonio Campos ha contado para este film con un reparto espectacular en el que destaca

Tom Holland, como el muchacho atormentado por todas las locuras que le rodean. Le acompañan, transfiriendo magníficas interpretaciones Bill Skarsgård, Jason Clarke, Sebastian Stan, Robert Pattinson, Eliza Scanlen, Mia Wasikowska, Riley Keough, Haley Bennett, Mia Goth, Tracy Letts, Gregory Kelly, Gabriel Ebert, Emma Coulter, Harry Melling, Douglas Hodge, Lucy Faust, Drew Starkey y Kristin Griffith. Música de los compositores americanos Danny Bensi y Saunder Jurriaans. Fotografía de una exitosa directora de fotografía, la inglesa Lol Crawley.

“El diablo a todas horas” La historia de varias historias terribles a lo largo de los años…

Robert Pattinson

Imagen de Robert PattinsonRobert Pattinson (Robert Thomas Pattinson) nació en Londres el 13 de mayo de 1986. Es un actor, modelo, productor y cantante británico.

Ficha en Imdb: http://www.imdb.es/name/nm1500155/

Sus películas en Comentamos cine:

Crítica: El diablo a todas horas (2020)

Crítica: Agua para elefantes (2011)

Crítica: Eclipse (2010)

Crítica: Recuérdame (2010)

Crítica: Luna Nueva (2009)

Crítica: Agua para elefantes

CartelAgradablemente sorprendida inicio la crítica de la película “Agua para elefantes”; ambientada en el mundo del circo nos muestra los entresijos de su carácter, a la vez que disfrutamos de la magia con la que está filmada.

Argumento tan sencillo como sugerente, eso es lo que nos recrea el libreto que el autor de la perdurable “El rey pescador”, Richard LaGravenese, (basándose en la novela del mismo título de la escritora canadiense Sara Gruen), ha compuesto para el director austriaco Francis Lawrence, (ahora nacionalizado estadounidense). A este cineasta lo recordamos por “Constantine” en 2005, en 2007 la inquietante y tensa “Soy leyenda”, pero su mayor logro es la gran cantidad de videos musicales que ha dirigido desde el año 1993, el último, terminado en abril de este año, es lo nuevo de Beyoncé “Run The World (Girls)”.  En “Agua para elefantes”, Francis Lawrence, nos adentra en un retrato social sagaz.

Ésta es la historia: llovía torrencialmente, cuando Old Jacob (Hal Holbrook) se posiciona en las puertas de un circo desconocido, el viento y el agua le atraviesan los huesos, en el peor invierno que se ha conocido; los empleados del circo, no comprenden qué puede hacer allí un hombre de esa edad, y le invitan a marcharse de vuelta a la residencia donde reside. El anciano, insiste y le recibe el responsable de la instalación, Charlie (Paul Schneider, Brig star). Charlie, con una sola mirada comprende la soledad del viejecito. Tiene las manos entumecidas por el frío, y su cara, de semblante tranquilo y dulce, divulga una emocionada ternura. Sus enrojecidos ojos azules miran con avidez las fotos que hay expuestas en el despacho. Se emociona. Jacob le cuenta a Charlie, que él, hace muchos años formó parte de eso tan hermoso que es el circo, poco a poco, profundizando en sus recuerdos, retorna a sentirse tan joven como entonces. Jacob, de joven, (Robert Pattinson), recuerda cada minuto de la época de la gran depresión, años 30, cuando era un alegre estudiante de veterinaria y su vida se vio truncada por la muerte de sus padres, su mundo venido abajo en un segundo le provocó un tremendo cambio en su vida, y huye, no se sabe de qué, quizás del horror de verse solo. Ya en otra ciudad, por casualidad entra a trabajar para los hermanos Benzini como veterinario de su circo, se deslumbra por la belleza de Marlena (Reese Witherspoon), el día a día va fortaleciendo una gran amistad entre ellos. Marlena es la caballista del circo y está casada con August (Christoph Waltz), el dueño y responsable de todo lo que allí acontece, un hombre intratable y agresivo que hace vivir a Jacob las peores pesadillas de su vida.

Francis Lawrence dirige este espectáculo cinematográfico agudo, con su característica eficacia en el uso de trasmitir con imágenes y distribuye mínima y sutilmente los números circenses transportándonos de manera emocional al mundo de la ilusión. Sin olvidar el acierto en la personal y brillante música de James Newton Howard, el vestuario, las atmósferas creadas, los decorados y el magnífico colorido, gracias a la exquisita fotografía de Rodrigo Prieto (Biutiful, Wall Street 2 El dinero nunca duerme). Esta película, a pesar de componer un cuadro abigarrado y repleto de matices, consigue conservar su intimismo gracias a que los personajes son capaces de trasmitir la sensación de que albergan tras de sí una institución, una vida, una entidad, a la vez que iluminan los aspectos generales del film, como son, el sentido dramático de la historia y el aroma particularmente contradictorio del amor.

Cartel

Robert Pattinson, en esta ocasión, sabe conferir a su personaje la dosis necesaria de presencia física, ciñendo un toque de nervio y personalidad, para hacer creíble a Jacob, un chico solo, triste y desconsolado, que quiere dar sentido a su vida embarcándose pese a todo, en la senda del amor y de un futuro en compañía (Os dejo aquí una entrevista a Pattison sobre la película). Reese Witherspoon finalmente ha sido la actriz que se ha metido en la piel de Marlena personaje éste, muy codiciado, y que a ella le viene como anillo al dedo, a pesar de que hace un trabajo meritorio, la he encontrado algo débil, no me ha creado ninguna sensación su esfuerzo. Christoph Waltz destaca sobre todo el reparto, sabiendo dar la dosis justa de maldad y todo el perfil que exige su complicado papel. Excelente Hal Holbrook, incluso en su caracterización con Pattinson, perfecto. También debo añadir que, en general, todo el elenco de actores forma un grupo irreprochable.

“Agua para elefantes” termina y yo me quedo mirando a la pantalla… salen los títulos de crédito… y sigo ahí, esperando que la historia continúe… ¡Qué bonita!… También me ocurrió con otro título de este guionista, “Los puentes de Madison”.


Crítica: Eclipse

Cartel de la películaGuión adaptado por Melissa Mosenberg de la tercera novela de Stephenie Meyer, en esta ocasión dirigida por David Slade, “Eclipse”. Analizando su argumento, nos encontramos más fuerte el triángulo de tensión amorosa entre las tres principales figuras, pero si el análisis lo hacemos de los personajes nos hallamos ante una sensación idéntica a entregas precedentes.

En esta ocasión nos muestran a Bella Swan (Kristen Stewart) en la difícil situación de tener que decidir entre seguir siendo humana o ser convertida a vampiro para estar eternamente con Edward (Robert Pattinson), ella quiere su muerte y conversión, pero él sólo admite esto, en el caso de estar casados.  Jacob Black (Taylor Lautner), el chico lobo, no quiere perder a Bella pues ahora está más enamorado de ella que nunca. Mientras estos amores enfrentados van discurriendo, en Seatle aparecen personas muertas y nadie sabe desvelar el misterio, es ahí donde aparece Victoria (Bryce Dallas Howard, Más allá de la vida) detrás de un  ejército de neófitos para enfrentarse con los Cullen y destruir a Bella.

Si queremos adentrarnos en esta película más allá del interés romántico, no hay nada más que destacar que no se haya visto en las anteriores, existen algunos cambios en cuanto al tratamiento de las luchas, en “Eclipse” ruedan cabezas (eso no había pasado antes), el desarrollo es algo más sofisticado, los espacios más abiertos con unos paisajes impresionantes, varias localizaciones de los bosques de Vancouver, -esto le da un  bonito acento de suntuosidad serena, mantiene un ritmo distinto, más lánguido-. El color de fotografía de Javier Aguirresarobe, más oscuro, excelente como en las previas, y en la música yo echo de menos el tono esplendoroso que Howard Shore puso en las anteriores, en “Eclipse” se aprecia menos la cuna musical.

En la dirección David Slade, no saca todo lo que esperábamos de él, teniendo como antecesoras a “30 días en la oscuridad” o “Hard Candy”, esta cinta prometía más en cuanto a la acción, pero los enfrenamientos entre vampiros, lobos y neófitos no llegan al nivel esperado, quedando diluidos en otra lucha más de la saga.

En las actuaciones, no tengo que analizar a ningún actor; sin destacar a nadie, acepto el trabajo de los actores, sin más. Como había comentado en otras ocasiones, no deja de sorprenderme que en las escenas que muestran los momentos amorosos, la cara de los personajes no pertenezca a eso momento cumbre, permanece estática; estoy de acuerdo que Cullen es frío, pero Bella es humana y no refleja emoción alguna.

Si hablamos del fenómeno global que Crepúsculo ha creado, aquí no sé qué decir, muchos seguidores pero en la sala en la que estuve el sábado no había más de treinta espectadores y se había estrenado tres días antes…  Quizá la ausencia de público fuese debida a las vacaciones, a que asistí a la primera sesión o a que la entrada de un cine en Madrid cuesta siete con noventa euros y este vergonzoso precio hace que muchas personas a las que les encantaría ir al cine, se queden en su casa con las ganas, esperando que las películas salgan en DVD.

En fin que si sois seguidores de esta saga seguro que os gustará, encontrareis las diferencias citadas y disfrutareis en el encuentro con vuestros favoritos, a los que no lo sois os vuelvo a decir que vaya precio tiene el cine…

A %d blogueros les gusta esto: