Crítica: Lucy
4 septiembre 2014 1 comentario
Los grandes éxitos en la gran pantalla del director de cine Luc Besson le han granjeado una fama que le sitúa entre los primeros y más creativos maestros del cine europeo. Fama que no decae como lo demuestra el hecho de que sus películas estén vigentes en todo momento. Cada película de Besson, mantiene atento el interés del espectador desde los primeros minutos. La eficacia de las películas del director francés reside, en la mayoría de los casos, en la acción y la ciencia ficción, en las imágenes espectaculares que se suceden. De ahí que gusten tanto a sus seguidores como al gran público. Entre sus numerosas obras destacan: “El quinto elemento” y “El profesional (Leon)”. Con idéntica materia prima, de nuevo marca estilo, con “Lucy”, su nuevo trabajo y la que hoy nos ocupa, es una buena muestra de lo que consigue en el género. Aquí las continuas complicaciones de la protagonista, el riesgo, la audacia, hacen que el espectador no se aburra en ningún momento, y dentro de un complicado juego, el dato científico, que hace las veces de instructivo sobre unos escenarios a cuál más alucinante.
Lucy (Scarlett Johansson) da vida a una estudiante obligada a transportar una bolsa de droga. En el traslado, adquiere poderes sobrenaturales cuando la bolsa se rompe y las electrizantes partes desmenuzadas entran en contacto con su cuerpo. Se convierte en una súper mujer luchadora. Su memoria se desarrolla y como tiene solo veinticuatro horas de vida, las pasa creando mensajes impresionantes y desmedidos de su cerebro que dejan boquiabierto a un científico, el profesor Norman (Morgan Freeman).
Una película muy ágil y efervescente. De pequeños y grandes detalles que la hacen muy entretenida. Lucy no tiene tiempo, corre y corre con todas sus fuerzas, por su propio bien, por el del conocimiento. Mientras ves los detalles de acción que van cambiando según transita, intentas adivinar qué podrá pasar, pero se hace imposible, porque cada fotograma descubre algo nuevo. A lo mejor alguien podrá decir que durante el film lo único que se ve es a una mujer corriendo sin parar, notoriamente angustiada por la presión a la que se encuentra sometida, pero es ese agobio el que marca en muchas partes el desarrollo técnico de la película. También oí decir que es un absurdo y yo me pregunto si buscan una lógica equivocada en una propuesta de ciencia ficción. Para mí técnicamente no tiene ningún error, es perfecta la dirección, el montaje y los efectos son sorprendentes, con un ritmo excelente, que le da atractiva atmósfera, intriga, divertimento y algo de reflexiones científicas, además el trato temporal que posee me resulta muy interesante.
Todos los actores renunciando a su personalidad se introducen en sus personajes guías, casi un pretexto, por los que el espectador viaja a través de las imágenes: Scarlett Johansson, Morgan Freeman, Choi Min-sik, Amr Waked, Yvonne Gradelet, Jan Oliver Schroeder, Julian Rhind-Tutt, Pilou Asbæk, Analeigh Tipton, Nicolas Phongpheth, Luca Angeletti, Loïc Brabant, Pierre Grammont, Pierre Poirot,Bertrand Quoniam, Pascal Loison, Pierre Gérard, Isabelle Cagnat y Frédéric Chau. La música es de Eric Serra y la fotografía de Thierry Arbogast.
Se podría decir que “Lucy” es como la vida, porque también podemos decir que las frívolas variaciones que nos surjan nos pueden hacer que la vida gire completamente, o que “el tiempo pase ligero y no se note que pasó”, como la protagonista dice en una frase. Si ven la película lo comprenderán.
Gracias por tu crítica, por lo que leo será un placer ir al cine (después de meses) para ver esta película como apuesta segura.
Un saludo y enhorabuena!