Crítica: Todos tenemos un plan
11 septiembre 2012 5 comentarios
Las colmenas que abren el film constituyen sin duda alegorías visuales pero sirven también, por disparidad, para hacer supuestamente palpable la condición del bien y el mal que es el presente de la película. Su narrativa con anhelos discursivos se construye a partir del símbolo. Crítica de la película “Todos tenemos un plan”.
Ana Piterbarg, directora y guionista argentina, desde el año 1998 está mezclada intensamente en el mundo cinematográfico. Empezó como asistente de producción, después guionista y con el tiempo directora de cortos, documentales y series comedia para televisión. Actualmente, además de arriesgarse a dirigir su primer largo “Todos tenemos un plan”, es profesora en la Escuela TEA IMAGEN en Argentina. Por esta película obtuvo el V Premio de Guión Julio Alejandro.
La historia que nos presentan se desarrolla en Buenos Aires, Tigre, Delta del Paraná, entre unas aguas calmas, rodeadas de escarpada vegetación. En esta deliciosa orilla vive Pedro (Viggo Mortensen) separado desde hace años de su hermano gemelo Agustín (Viggo Mortensen), éste vive en la capital, está dichosamente casado y es médico de profesión. Su mujer (Soledad Villamil) vive un delicioso momento haciendo los trámites de la adopción de un bebe, sin embargo Agustín empieza a cuestionarse si la vida que mantiene tiene sentido para él. Por otro lado su hermano Pedro, muy enfermo, pronto vendrá a visitarle….
No hay grandes cosas para el deleite que pueda destacar de esta película, el desarrollo de personajes es flaco y se prolonga en una ebullición quizás novedosa pero no con la fuerza que hubiese reclamado un guión más riguroso; tiene la voluntad pero se pierde en confrontaciones contradictorias y en prácticas morales débilmente desplegadas, haciendo de ella una obra que tal vez para ser la primera de la joven directora Argentina merece un espacio de confianza pero desde luego no revela nada nuevo. Eso sí, se le reconoce un gran dominio del relato en el plano visual, buena fotografía y la imagen tranquila y sombría que asigna al espectador sensaciones de una intriga que en la realidad se pierde sin lograr dejarla bien encajada. Resta anotar la extrema fragilidad con que se narra, la orfandad de fuerza en el mensaje y la confusión de los discursos, además de los frentes que permanecen abiertos incluso terminada la película.
Nada que sobresalga, ya lo he dicho, ninguna cosa a destacar, solo las interpretaciones marcan en positivo las horas de un reloj que funciona quizás demasiado lento. Los poco complejos personajes caminan por sus limitaciones y es la suerte de la película, el plantel de actores. Viggo Mortensen trabaja con oficio, Soledad Villamil se luce en su breve actuación, Daniel Fanego, Javier Godino, y Sofia Gala dan el toque necesario a las interpretaciones.
A todo el conjunto le dedico un aprobado simple, más por la forma en que Piterbarg ambienta la escena que por la trama en sí.
¡Hola! Marel ya de vuelta, espero que vengas descansada de tu jardin para comenzar nueva tamporada.
Esta película me a gustado. La interpretación de ( Viggo Mortensen) .
Es una película lenta con futografía bonita, poco más que destacar.
Bienvenida amiga un besazo.
Esto si que es Lola, ver a ese tío ENORME.
La peli es una cosa blandita, que para como esta el precio de los cines, ya pido cuentas a las productoras y exijo COSAS MEJORES.
Vamos, que ya lo dice mas o menos la crítico de la página.
Carlos: La pelicula ( La caretera) no la conozco pero prometo verla, pues Viggo Mortensen me encanta. Un saludo.
Estamos más o menos de acuerdo amigos. Muchas gracias, Carlos, por esta recomendación, “La carretera» me parece una película muy aceptable, el libro muy triste.
Lola, pusiste interés en verla, ¿ la viste?
Un abrazo para los dos.