Crítica: Buried (Enterrado)
4 octubre 2010 3 comentarios
Rodrigo Cortés dirige este complejo filme, con un elaborada simbología. Película viva y redonda, cuenta en el reparto con Ryan Reynolds, actor que hace en “Buried (Enterrado)” la mejor interpretación de su carrera; del guión se encarga Chris Sparling , bien escrito y repleto de detalles que no dan tregua en ningún momento.
Cuando empieza la sesión salen los títulos de crédito, a continuación la pantalla se oscurece, no hay sonido no se ve nada, silencio, silencio, el numeroso público que puebla la sala, espera aguantando la respiración que ocurra algo…poco a poco se va intuyendo un aliento…es un hombre, Paul Conroy (Ryan Reynolds). Es un hombre americano, casado y con un hijo, que por tener un sueldo mayor se marchó a trabajar de transportista a Irak, ahora lo han capturado en un asalto y lo han secuestrado, cuando despierta se encuentra enterrado vivo en una caja de madera, tiene en su poder únicamente un teléfono móvil y un mechero. El móvil tiene menos de la mitad de batería, pero es el único medio para tratar de escapar de su terrible alucinación. La cobertura inestable y la insuficiente batería son sus letales enemigos en una carrera a vida o muerte contra el tiempo: sólo dispone de un mínimo tiempo, dos horas para lograr su rescate.
Rodrigo Cortés presenta una puesta en escena minúscula, pero tremendamente efectiva, trabaja el escenario como si se tratara de un gigantesco espacio, todo está medido, en él nos adentra en su sitio reducido, con un ambiente opresivo, un desierto sin nombre, la soledad del encierro de un hombre comprimido intentando vislumbrar algo entre las tinieblas de su prisión.
“Buried (Enterrado)» sorprende por lo bien hecha y contada que está, su guión y su presentación conducen inexorablemente al espectador hacia el final, esperando y deseando que se pare esa carrera que lleva al personaje al deterioro físico y psicológico, pues su limitaciones cada vez son más y sus recursos cada vez son menos La dirección de Cortés hace que vaya a ser inequívocamente la mejor película del otoño, también con mucho, el guión, que afila el recorrido, con su carga de profundidad sobre la base de un argumento sencillo juega fundamentalmente con los sentimientos, la desesperación y el desamparo. La banda sonora de Víctor Reyes encumbra los contrastes despuntando las situaciones más opresoras que jamás hemos vivido en una película española.
El discurso político es la premisa, en definitiva un cine de denuncia que intenta que el espectador tome conciencia de la funesta repercusión y los daños colaterales del ataque americano a Irak. Además, esta película tiene un puente conceptual por el que admite tantas lecturas como se le quiera dar, queda libre la interpretación del espectador, se puede ver sólo lo que muestra la pantalla: un hombre luchando por salvarse, por mantener su entereza, un ser que pasa del desconcierto inicial a una tremenda y avasalladora desesperación final, pero también podemos ver al hombre fuera de ese contexto y le vemos enterrado en vida como metáfora de la degradación del mismo hombre, y contemplamos a las sociedades a las que pide ayuda descolgadas de lo humano. Hay mucho espacio para desplegar tu propio juicio.
Por todo lo que he comentado yo recomiendo esta película sobrecogedora, creo que pretende una reflexión moral.
Ví esta película y me encanto. Me encanta como está hecha, la iluminación, el actor…todo. Parece un ejercicio teatral de » y si estuvieras en esta situación con solo estos objetos. Qué harías?». Aparte de eso creo que llevo más de once años siendo de Amnistía Internacional y sé, desgraciadamente, que hay millones de casos como este, con otros nombres, en otros lugares y más repulsivos si cabe.
Muy buen comentario, muy buena película.
Besuchos
Sorprendente película, Eva. ¿Verdad que no parece española?
Besos guapa
Voy con retraso, mucho, como siempre pero sigo seleccionando según tus recomendaciones, Marel. Me ha encantado la película. Está en su justa medida, lo pasas mal, muy mal, pero no es de éstas que luego te duele el cuerpo de haber estado encogida. La denuncia es terrible. El momento de la llamada grabada… (no digo más), de lo más fuerte de la película. Admirable el director por conseguir tanto con lo que en apariencia es tan poco. El actor, buenísimo.
Besos